Invictus narra una parte poco importante, pero muy relevante de la transición Sudafricana. En un país aún convulso en el que Nelson Mandela acaba de salir de la carcel y de ascender a la presidencia del gobierno, nadie, ni negros ni blancos ven posible cerrar la herida tan profunda que ha dejado el Apartheid. Pese a los mensajes conciliadores de Mandela, la sociedad sigue viendo dos colores distintos en todo lo que acontece en el pais, y lo en que va a acontecer, que es nada más y nada menos que la copa del mundo de Rugby

Qué decir de Morgan Freeman. Tiene un oscar pero podría tener tres o cuatro sin despeinarse. Uno de ellos el de este año, (ya que no se enfrenta a Cristoph Waltz, que se lo debería llevar de calle) por una tremenda interpretación del presidente sudafricano. Cada una de sus escenas consigue conmover. Es un genio.
Clint Eastwood detrás de la cámara enorme también. Si bien la cinta no es un historión dramático como los anteriores que nos ha venido regalando, tiene un trasfondo que no deja indiferente. Obviamente, muchos claroscuros del proceso de reconciliación sudafricano no se han tenido en cuenta y todo queda muy perfecto y muy "disney", pero el ser humano queda retratado una vez más con todo lujo de detalles.
Y no es cosa de Sudáfrica, España vive dividida entre Merengues y Culés, entre Peperos y Sociatas, pero cuando sale al campo "la roja" todo el mundo vibra por igual (salvo los que echan de menos a Raúl). Cuando Gasol, Calderón, Reyes, Navarro, etc recorren el mundo trayendo copas a España, todos les empujamos. Contra las ensaladeras de la Davis nadie levanta la voz...
Aquí sabemos cómo el color rojo puede unir a un pais, pero es delicioso cómo Invictus nos muestra como el verde y dorado de los Sprinboks, consiguió unir a lo que, de facto, eran dos paises.
1 comentamientos:
Pues yo últimamente cada vez que veo que en una película sale Morgan Freeman, empiezo a temblar.
Es un gran actor, pero tiende a unirse a ciertos proyectos que dejan su estatus por el suelo :S
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