Ande yo caliente...

Venga, vamos a empezar con una conversación de ascensor:
"Parece que ya está aquí el frío ¿eh?"

Pues sí... y ha venido para quedarse, al menos hasta primavera. Ayer a las 7 de la mañana cuando salía de casa la temperatura era de un grado (1ºC, 274K) y no veas como se notaba. Pasar en menos de media hora del microclima placentero que hay bajo la manta al frescor que me acompañaba de casa al metro cuesta. Asi que si ya era complicado levantarse por tener que ir a currar, por haber dormido seis horas y por saber lo que te espera en los días siguientes, ahora se suma el factor "conloagusticoqueseestáaquídentro.". Y multiplicad esto por tres los días que llueve.
¿Que hacer para vencer esta pereza? No lo sé, se admiten sugerencias.

Yo quiero ser igual, pero más moreno

Ahora, una vez en la calle hay que saber que la cara es la parte del cuerpo por la que más calor se pierde, ya que está llena de capilares. (La cara y las orejas). Asi que el sentido común dice que hay que blindarse ante los gélidos vientos. Y aquí quería llegar yo...
Son muchos los que se pasan el verano diciéndome "¿No te dan calor esas lanas?" ¿Y ahora qué? No os imaginais el gustico que da taparse las orejitas con el pelo cuando viene el fresco. La suma de la melena con una bufanda minimiza la piel que queda al aire (que viene a ser poco más que el entrecejo) y hace que conserve bastante calorcito facial en los diez minutillos que me separan del metro. Soy como un ninja capilar. Además, quieras que no las barbacas también abrigan.

Así que... a todos esos que se les ve el cartón por propia voluntad ¡JA! (al resto, mis condolencias)