Rosas Rojas

Habrá que escribir algo ¿no? Ya va tocando...

Voy a aprovechar para hablaros de mi último cabreo. Los que me conocen saben que en condiciones normales (25ºC y 1 atm) soy de lo más pausado y que pocas cosas me enfurecen. Pero no puedo con las injusticias, y el viernes tuve que asistir a una. Bueno, asistí porque quise. Pagué mis seis eurillos y me dieron una entrada para "Las Trece Rosas"

Para los que no lo sepan, la película se basa en un libro, y el libro en hechos reales. Hechos que no son otra cosa que el fusilamiento de 13 jóvenes, en su mayoría menores de edad, en el Madrid de los primeros días tras la guerra civil. La película nos va presentando las distintas personajas, sus relaciones, sus motivaciones y sus circunstancias. A la vez, pinta un excelente retrato del "miedo a la paz" que reinaba en esos primeros días de dictadura.


Es dificil o quizá imposible abstraerse del color político de unos y otros. Por supuesto que si la peli es más bien "roja" es porque se quiere hacer hincapié en lo malos que eran los fachas y todo eso. Pero, siendo objetivos e intentando verlo en blanco y negro, sin ideologías ni colores, la historia es un cuento de una crueldad desgarradora. Pone al descubierto la indefensión (que palabra más fea...) en la que el pueblo estaba sumido ante la prepotencia de los vencedores, que imponen su ley con total impunidad y sin ningún escrúpulo.

Yo salí del cine cabreado, asqueado y lleno de desprecio ante la especie humana. Me da verdadera lástima ver cómo por unas ideas (repito: del color que sean) la gente puede llegar a despreciar de esa manera la vida de otro ser humano. Ver como la guerra, la ambición y el miedo puede cambiar a la gente hasta llevarle a comportarse (para lo bueno y para lo malo) como lo hacen algunos personajes...
Supongo que una buena película es aquella que te conmueve, y según ese criterio "Las Trece Rosas" es un film excelente. No ganará un Oscar al mejor nada seguramente, pero si no os importa cabrearos, merece la pena.

1 comentamientos:

Anónimo dijo...

Pues si, una triste verdad que no todo el mundo ve con claridad. Las mayores injusticias no vienen de la mano de los colores, sino de los hijos de puta (hay que decirlo más) que se encuentran por doquier.