Debido a esta circunstancia existen en mi oficina un par de cafeteras en funcionamiento casi perenne que abastecen a las personas que trabajamos allí e incluso a los jefes. Pues esta mañana por algún tipo de error de cálculo ha empezado a brotar de ambas cafeteras un líquido de una asquerosidad indescriptible pese a la riqueza del castellano. Ha habido que limpiarlo todo y volver a poner las cafeteras a funcionar.

Para evitar la demora en la ingesta de cafeina que esto ha provocado, los zombis de este animado carbohidrato han optado por recurrir a la máquina de café de la zona de vending. (Que debe ser el gerundio del verbo "to vend" ¿¿??)
Doy por hecho que todos habeis tomado uno de esos cafés, que no saben a café, que no tienen color de café y que en lugar de posos dejan algo parecido al carbon vegetal. ¿Habeis pensado que hay gente que vive gracias al dinero que dejamos en las máquinas por tomar este café de garrafón? ¿Tan necesitados estamos de cafeina que hemos de recurrir a algo que deja nuestro píloro a punto de nieve?
Yo, cuando tengo que elegir entre el café de vending y no tomar nada... lo pido con extra de azucar. :¨(