Depresión pre-trabajacional

Leo en una web médica que el Síndrome postvacacional se manifiesta de la siguiente manera:

Lo habitual es padecer a la vuelta de vacaciones un cuadro de debilidad generalizada, astenia e incluso pérdida de apetito. Puede haber problemas de insomnio que conviven con una somnolencia importante a lo largo del día. La capacidad de
concentración se ve limitada así como la tolerancia al trabajo. Esta falta de tolerancia al trabajo viene caracterizada como una sensación de desidia y hastío.

Pues así estoy yo... solo que no he empezado a trabajar todavía, así que más que Post-vacacional es pre-trabajacional. Es pensar en lo que me espera mañana en el curro y venirseme abajo todos los esquemas. Espero equivocarme y que solo se deba a la conjunción de ese factor con una día así de gris y el hecho de haber pasado 48 horas seguidas sin salir de casa... pero madre mía ¡qué falta de ganas!


Al final estas vacaciones han resultado de lo más extraño, me he pasado un montón de tiempo en casa pero no he hecho nada. La pila de cartas por colocar sigue ahí, los documentos a archivar una vez terminado el año siguen igual y así con prácticamente todo lo que había dejado para cuando tuviera tiempo. Se tendrán que esperar a que tenga tiempo y ganas.
Y la otra función terapéutica de las vacaciones que es desconectar del curro para volver con ánimo ya os digo que nones. Desconectado sí, pero de ahí a haber cogido energía para despachar las cosas nada de nada. Más bien todo lo contrario, me cogería vacaciones otras dos semanas más. U otros dos meses... Como decía un chiste sobre informática que circulaba por ahí, lo que apetece es irme al campo a vivir en plan ermitaño a comer nueces y hablar con dios. Si no perdiera el contacto con tanta gente lo haría. Pero es que ellos son los que al fin y al cabo hacen que cada día merezca la pena levantarse de la cama, o no meterse en ella para que las noches guays no terminen.
En fin aunque solo sea para tener dinero para pagar las comidas, cafés y cenas con toda esa gente, volveré mañana a currar. ¡Pero sin que sirva de precedente!